Incorporación masiva de mujeres de clase media al mercado de trabajo	Provoca, que en un Estado asistencialista, en cuanto a política familiar y fuerte división sexual del trabajo se refiere, que estas mujeres tengan que afrontar una doble presencia en el hogar y en el trabajo, o en otros casos decantarse por la mercantilización de actividades domésticas y de cuidados. Esta inserción laboral femenina ha venido acompañada por cierta segregación de genero como consecuencia del orden sexual anterior.
Remodelación de familia extensa a familia amplia	Se basa en un tipo de convivencia reducido, pero estableciendo fuertes lazos familiares necesarios para el bienestar intergeneracional.
Envejecimiento progresivo de la población	Las sociedades mediterráneas están viviendo un envejecimiento progresivo de la población, que hace aumentar la demanda de servicios de cuidado.
Aumento de la tasa de divorcios	Se traduce en un incremento de las familias monoparentales, encabezadas por una mujer principalmente.
Nueva concepción del uso del tiempo en el núcleo familiar	Mayor valoración del ocio y tiempo libre para sí mismo y para dedicarlo a hijos e hijas.
Ascendente nivel de aceptación de mujeres autóctonas para trabajar	estas mujeres huyen de trabajos estigmatizados, considerados sucios y serviles, como es el caso del servicio doméstico. Han aumentado su poder social de negociación, permitiéndose así aceptar o rechazar determinadas condiciones laborales.
CONCLUSIÓN	Todos estos cambios han desestabilizado las formas tradicionales de bienestar, basadas casi exclusivamente en la institución familiar y en la gestión del colectivo femenino.