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Si usted preguntara a varias personas si creen que hay un lugar llamado cielo, la mayoría probablemente le diría que sí. Pero si les pregunta cómo es o cómo se puede llegar allá, sospecho que recibiría diversas respuestas. Aunque muchas per...
Si usted preguntara a varias personas si creen que hay un lugar llamado cielo, la mayoría probablemente le diría que sí. Pero si les pregunta cómo es o cómo se puede llegar allá, sospecho que recibiría diversas respuestas. Aunque muchas personas se aferran a la creencia en el cielo, y esperan ir allá cuando mueran, muy pocas tienen una idea precisa del mismo.
tienen una idea precisa del mismo.
Ya que los seres humanos estamos atados a la tierra hasta la muerte, son frecuentes los conceptos errados acerca del cielo. Algunas personas lo imaginan como un lugar donde flotan espíritus amorfos, o donde hay ángeles sentados en nubes tocando arpas. Y las películas presentan su propia versión de lo que nos espera.
En medio de todas las opiniones confusas y contradictorias, debemos recordar que la única fuente segura de información precisa sobre el cielo es la Biblia. Dios nos da en sus páginas destellos de escenas celestiales. Aunque podamos anhelar tener más detalles y descripciones, el Señor
Este es un testimonio de 7 jóvenes que fuero visitados por la persona de Cristo para llevarlos de paseo por las fáuces mismas del horrorizante infierno.
Eran lugares aterradores que producían pena y asco, miedo y temblor, donde no existe paz n...
Este es un testimonio de 7 jóvenes que fuero visitados por la persona de Cristo para llevarlos de paseo por las fáuces mismas del horrorizante infierno.
Eran lugares aterradores que producían pena y asco, miedo y temblor, donde no existe paz ni amor ni tranquilidad para el que está en ese lugar.
Vieron personajes artísticos conocidos anteriormente por todo el mundo sufriendo penas allí y pidiendo y pidiendo perdon a Cristo Jesus.
Vieron multitudes ser tragados por inmensos lagos de llamas y cómo perdían parte de sí, de sus rostros, de sus cuerpos, cabellos, ojos y oídos.
El infierno no se le desea a nadie, ni a tu peor enemigo.
¿CÓMO PUEDO LLEGAR AL CIELO?
La Biblia dice claramente que después de la muerte solo hay dos posibles destinos para la humanidad: el cielo o el infierno. En una historia que contrasta vívidamente el bienestar del paraíso con el tormento del ...
¿CÓMO PUEDO LLEGAR AL CIELO?
La Biblia dice claramente que después de la muerte solo hay dos posibles destinos para la humanidad: el cielo o el infierno. En una historia que contrasta vívidamente el bienestar del paraíso con el tormento del infierno, Cristo dijo que cambiar de lugar es imposible (Lc 16.19-31). Sabiendo esto, sería una insensatez ignorar la Palabra de Dios, y arriesgarse a confiar en nuestras propias ideas acerca de cómo llegar al cielo.
Muchas personas piensan que su destino eterno depende de la manera en que se comporten. Si son más las buenas obras que las malas, creen que Dios les aceptará. Pero el Señor dice que todas nuestras buenas obras son “como trapo de inmundicia” ante Él (Is 64.6). Ya que todos somos pecadores por naturaleza, no estamos calificados para entrar en la santa morada de Dios.
Nuestra entrada en el cielo no depende de lo buenos que seamos; lo que importa es lo bueno que es Cristo, y lo que Él hizo por nosotros.
Pero allí caen cada instante miles y cientos de miles de almas sin Dios porque no amaron a Dios ni le obedecieron nunca. Porque nunca aseguraron sus vidas a Dios para cuando llegue el momento de su muerte o partir de este mundo no caer en ese lug...
Pero allí caen cada instante miles y cientos de miles de almas sin Dios porque no amaron a Dios ni le obedecieron nunca. Porque nunca aseguraron sus vidas a Dios para cuando llegue el momento de su muerte o partir de este mundo no caer en ese lugar de tormentos.
¿POR QUÉ DEBERÍA ESTAR INTERESADO EN EL CIELO?
Algunos cristianos se contentan simplemente con saber que estarán seguros por la eternidad. Por supuesto, quieren experimentar las glorias de arriba, pero no ven ninguna conexión inmediata entre...
¿POR QUÉ DEBERÍA ESTAR INTERESADO EN EL CIELO?
Algunos cristianos se contentan simplemente con saber que estarán seguros por la eternidad. Por supuesto, quieren experimentar las glorias de arriba, pero no ven ninguna conexión inmediata entre sus vidas cotidianas y su destino futuro. Por tanto, no sienten el deseo de saber más sobre el cielo. Pero Cristo quiere que los creyentes sepan cuál es “la esperanza a que él (nos) ha llamado, y… la gloria de su herencia en los santos” (Ef 1.18).
El cielo es nuestro hogar futuro. Allí es donde está nuestra ciudadanía; somos solo transeúntes en la tierra. Toda una vida aquí parecerá un simple soplo en comparación con la eternidad. Siempre que usted lea un pasaje bíblico que describa una escena o actividad celestial, inclúyase en ellas, porque esa será su realidad. Las puertas del cielo y las calles de oro no son un cuento de hadas. Algún día usted pasará por esas puertas, caminará por esas calles, y verá cara a cara al Señor.
Vieron personas que deseaban volver al mundo tan sólo por un momento para mitigar aquel interminable tormento. 
Vieron que allí, lo más agoviante es la sed interminable en todos los que padecían esas penas allí y que no podían mitigarla.
Vieron personas que deseaban volver al mundo tan sólo por un momento para mitigar aquel interminable tormento.
Vieron que allí, lo más agoviante es la sed interminable en todos los que padecían esas penas allí y que no podían mitigarla.