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Jesús ha venido a salvarnos
Salvarnos de que? De la tristeza, de la soledad, del egoísmo, de la pereza, de la injusticia...Nosotros podemos elegir vivir de tal manera que hagamos felices a los demás y así el bien venza al mal. Jesús, con su muerte y resurrección , nos salvó del pecado y de la muerte y nos invitó a tener fe en Él.
El pecado y la muerte
Dios nos creó libres para colaborar con Él y con su creación. A veces las personas usamos nuestra libertad para elegir lo que está mal . A menudo somos egoístas, desobedientes, insolidarios, sentimos envidia, no respetamos la naturaleza... El pecado son todas las cosas que nos apartan de Dios, de los demás y de la Creación. La muerte es la ausencia de vida. Todo lo que impide una vida feliz es contrario a la vida. En la época de Jesús había marginados, pobres, enfermos... Personas que no podían vivir felices a causa del dolor, de la soledad y de la exclusión. En nuestros días hay personas que no pueden vivir con dignidad ni ser felices a causa del mal y de la injusticia de las personas.
El perdón de Jesús, perdón de Dios
Dios está siempre dispuesto a perdonarnos. En los evangelios se cuenta como Jesús perdonaba de manera incondicional, sin exigirles nada a cambio. Así, cambiaban de verdad, de corazón, acogían el amor de Dios y le respondían.
Jesús, su muerte y resurreción
En Semana Santa conmemoramos los últimos días de la vida de Jesús. A pesar de saber que su vida corría peligro, Jesús sigue enseñando a sus discípulos, curando, haciendo milagros... Jesús muere en la cruz y al tercer día resucita. Dios resucita a su Hijo de la muerte y le da la vida eterna junto a Él. La resurrección de Jesús llena de sentido la existencia de los creyentes. Los cristianos hoy vivimos la alegría de saber que Jesús resucitó y nos salvó y que debemos vivir con mucha fe en Él y amando a nuestros hermanos.